Tras un partido sufridísimo, el Sevilla logró reverenciar a su mayor leyenda con un triunfo labrado sobre el sudor, el ahínco , la sangre de Jesús Navas incluso por un golpe en la rodilla de Hugo Álvarez involuntario. y la cantera. El gol de Manu Bueno en el minuto 64 se aúna a los tributos distintos que ha tenido en una jornada única: la del último partido de la mayor leyenda del Sevilla en la historia.









