El Barcelona ha remontado el partido adelantado de la 19ª jornada de Liga contra el Atlético de Madrid (3-1) en el Camp Nou y se consolida de esta manera en el liderato de la competición doméstica. Baena adelantó al grupo rojiblanco en el minuto 14 y Raphinha igualó el marcador para los azulgranas en el 26, diez minutos antes de que Lewandowski fallara un penalti.

Ahora en la segunda mitad, Dani Olmo hizo el 2-1 en el 65, en una jugada en la que acabó lesionado. Ferran Torres, con el Atlético completamente volcado, logró el tercero para el Barça en el descuento.

El triunfo permite a los azulgranas ampliar a seis puntos su virtud sobre los rojiblancos y meter presión al Real Madrid, que va a visitar San Mamés este miércoles. El partido dejó 2 caras del Barça: una primera de respuesta inmediata tras el 0-1 inicial y una segunda de madurez, pegada y resistencia antes de sentenciar al contragolpe en el tiempo añadido. Con los dos equipos canjeando golpes, los de Hansi Flick supieron padecer en el momento en que tocó y fueron mucho más concluyente en los instantes decisivos.

El partido se resolvió a partir del minuto 65. Dani Olmo convirtió el dominio azulgrana en el 2-1 inmediatamente antes de caer sobre la clavícula y pedir el cambio para dejar su sitio a Marcus Rashford. El gol fortaleció la superioridad del Barça en ese tramo: Lamine Yamal rozó el tercero, Pedri tuvo que ser atendido y el equipo oscilaba entre cerrar el partido o cavar la trinchera final.

El Atlético tuvo el empate en una acción increíble de Almada en el 80’. Tras una pérdida azulgrana , caracoleó ante Joan Garcia, lo sentó y, con todo para marcar, envió el balón fuera. El Barça resistió con Joan Garcia agigantándose ante Sorloth y con Flick reajustando piezas, incluyendo la entrada de Christensen, para resguardar el marcador.

La sentencia llegó en el 96. Rashford aceleró en campo abierto, Dro y Casadó conectaron y Balde asistió a Ferran Torres, quien se viró en el área chavala para llevar a cabo el 3-1 definitivo. Un cierre liberador para un Barça que en los últimos minutos había tenido que defenderse con una defensa de cinco frente a un Atlético volcado.

El primer tiempo había dejado un 1-1 vibrante que reflejó el equilibrio del desafío. Lamine Yamal y Raphinha activaron al Barça de comienzo , pero fue el Atlético quien golpeó primero: Álex Baena atacó el espacio ante una defensa azulgrana muy adelantada, definió con una picadita y el VAR validó el 0-1 tras trazar una línea milimétrica.

El Barça respondió con personalidad. Pedri filtró un pase mágico a Raphinha, que regateó a Oblak con la zurda y definió con la derecha para el empate. A partir de ahí, nervios, ritmo alto y ocasiones en ambas áreas. Joan Garcia salvó al grupo al corregir un error de Cubarsí; en la otra portería, De Burgos Bengoetxea señaló penalti de Barrios sobre Dani Olmo. Lewandowski cambió su ritual en el lanzamiento y envió el balón a la estratosfera.

El polaco rozó la redención inmediata con un cabezazo imperial que Oblak salvó con una mano espectacular. Balde también acarició el gol con una carrera eléctrica y un tiro que Oblak detuvo en 2 tiempos. El descanso llegó con las espadas en prominente y la sensación de que el partido guardaba capítulos por escribir.

Y los escribió el Barça. Trazó mejor las carreras finales, supo madurar el duelo , resistió en el momento en que tocó y mató a la contra cuando halló espacio en las bandas. Una exclusiva remontada y el mensaje de un aparato que, bajo la mano firme de Flick, demuestra que quiere aferrarse como mucho prominente de la Liga.e el Celta de Vigo en el Bernabéu.